Amanecer en Paso Roballos

El despertador suena a las 7:00. Me incorporo para ver por la ventana de la casilla rodante hacia afuera. Lo primero que siento es el frío, después veo que el cielo está despejado y que el amanecer en Paso Roballos va a ser hermoso (Ver mapa). Es la primera vez en el viaje que tengo que abrigarme. Me visto a las apuradas, junto la mochila y el trípode, lo sacudo al Negro para que se despierte y salgo. Camino unos 300 metros y encuentro el lugar ideal.

Recién a las 7:25 los primeros rayos de sol iluminaban la Cordillera de los Andes. Temí que se nublara completamente, pero las nubes gruesas sobre los cerros eran estacionarias y no amenaza de mal tiempo:

Miro a la derecha y la Meseta del Lago Buenos Aires también se ve espectacular. Al mismo tiempo el mallín del río Columna se tiñe de amarillo cuando lo bañan los primeras luces del amanecer:

No me di cuenta que el Negro se había levantado y me sacó una foto en pleno proceso:

Luego él se concentra en el paisaje y las aves de la laguna cercana, así que aprovecho a fotografiarlo también:

La laguna que tenemos cerca es un vergel, al igual que todo el entorno estepario en esa zona, me hace acordar a Pilahue en mi niñez:

No deja de encantarme esta maravilla de la naturaleza. Al fondo de la imagen se ve el puente del camino que lleva hacia Los Antiguos, lugar donde se encuentra la barrera que gran parte del año bloquea el paso cuando la ruta está intransitable por nieve o barro:

Luego de las fotos desayunamos y nos preparamos para caminar el mallín y pescar el río Columna. Nos esperaba un día largo por delante y no nos imaginábamos que lo terminaríamos bien tarde en Bajo Caracoles.

Muchas gracias por mirar.

Mariano